Asociación de Mayores San José de Isora

Eusebia Padrón, Rosa Castañeda, Carmelo Padrón, Rosa Padrón, Miguel Quintero y Óscar Martín nacieron en San José de Isora, Valverde, en la isla de El Hierro. Desde los 10 años, comenzaron a trabajar en diversas profesiones como la agricultura, la ganadería, la construcción, la producción de quesos en cooperativas y las labores del hogar. A lo largo de más de 20 años, han sido miembros activos de la Asociación de Mayores de San José de Isora, defendiendo la importancia de estas asociaciones tanto para las personas mayores como para el pueblo.

Este grupo recuerda con nostalgia un tiempo en que San José de Isora era un lugar donde todos y todas colaboraban y la vida, aunque era dura, estaba llena de cercanía humana. Rememoran una época sin las comodidades modernas como neveras, luz eléctrica, gas o transporte no existían. A pesar de las dificultades, los vínculos entre las personas eran fuertes, y la vida se centraba en la ayuda mutua y las relaciones humanas.

En la infancia, sin acceso a transporte, jugaban en la carretera a juegos tradicionales como el trompo y el boliche, y de jóvenes disfrutaban de los bailes del pueblo al son de la música canaria. Crecieron en una época de dictadura, donde niños y niñas asistían a escuelas separadas. Con el paso del tiempo, sin embargo, han visto cómo su pueblo ha cambiado drásticamente. San José de Isora ha pasado de tener 1500 habitantes a apenas 300, con solo 14 niños y niñas en el pueblo. Lo que antes era un lugar vibrante con varios comercios y cinco colegios, ahora es un lugar envejecido y en declive.

A pesar de estos cambios, lo que más lamentan es la pérdida de las tradiciones y de la cercanía humana que caracterizaba a su comunidad. Costumbres simples como saludar al entrar en el transporte público se están perdiendo, y aunque el progreso ha traído mejoras materiales, sienten que ha contribuido al deterioro de las relaciones humanas y al desvanecimiento de las actitudes familiares y de solidaridad que antes eran la esencia de San José de Isora.